Hola a todos, les queremos compartir nuestra experiencia al hacer nuestras propias invitaciones para nuestra boda.
Luego de ver muchos modelos en internet y de ver cuáles pasaban a la recta final, empezamos a cotizar las invitaciones en diferentes lugares, sin embargo, no encontramos muchos modelos semejantes a los que habíamos seleccionado o su precio se elevaba significativamente, así que decidimos hacerlas nosotros mismos.
Cómo ya habíamos seleccionado el modelo y los colores, comenzamos a ver tutoriales, sacar los tipos de papel que necesitábamos, medidas de cada papel para la invitación y finalmente a cotizar los papeles. Nosotros tenemos acceso a Puebla y México así que fuimos checar a todos los lugares que encontramos buscando los papeles y viendo sus medidas para después hacer el cálculo de cuántos pliegos necesitábamos de cada papel para el número de invitaciones que requeríamos, de todos los lugares que visitamos fue en papelerías Lozano donde encontramos el mejor precio por mucho.
Por fin teníamos el papel, ahora era cuestión de cortar todos los papeles y empezar el diseño de los textos, lo cual también fue un proceso ya que hoy día existen muchos textos y distribuciones muy interesantes, pero finalmente realicé algunas opciones con diversas tipografías y disposiciones de los textos de entre los cuales escogimos el que más nos agradó para cada elemento de la invitación y sólo quedaba imprimir.
Ahora ya teníamos los papeles impresos y cortados, ahora a marcar, doblar, pegar y armar para finalmente sellar.
Todo esté proceso tuvo una duración aproximada de 3 meses dedicándole 2 horas diarias, así que sobre este punto sería la mayor advertencia, es un proceso tardado y cansado, pero la recompensa de ver nuestras invitaciones terminadas valió cada segundo invertido, además si lo hacen en pareja pueden tomar ese tiempo para conversar y planear otras situaciones de la boda así como nosotros lo hicimos.
Sé que será un gran recuerdo de nuestra boda, aquí les dejamos unas fotos de nuestras invitaciones.