Hola chicas!!!!
me casé el 25 de Julio y quiero compartirles una de las experiencias que tuve para que tengan mucho cuidado y no les pase a ustedes.
mis damas de honor fueron mis 2 mejores amigas, mis primas y mis cuñadas, como son muy importantes para mi, quise que estuvieran muy contentas con el hecho de ser damas, por lo que hice varias cosas para demostrarles mi cariño, entre esas cosas, hicimos una 2 sesiones de fotos especialmente para nosotras, les dí regalos, etc, una de las primeros detalles que tuve con ellas fue: dejar que eligieran el vestido que usarían, les dije cuales eran los colores de la boda, ellas eligieron un color y el tipo de vestido dependería de ellas. Eso lo determinamos 7 meses antes del gran día, y el 80% de ellas cumplió con lo acordado, eligieron vestidos hermosos de los colores de nuestra boda,sin embargo, unas semanas antes de la boda, mi cuñada me dice que siempre no quiere usar el color que había elegido anteriormente (el azul marino) y que iba a comprar un vestido azul rey (el color que menos me gusta en el mundo ), simplemente por el hecho de que ella quería verse sexy ese día, sus argumentos fueron: a ti no te debe gustar mi vestido, si yo lo voy a usar, además quiero verme super sexy en la boda de mi hermano, porque soy la hermana del novio y una dama, no soy cualquier invitada. ya se imaginarán el estrés que me causó!!!! le dije que podía usar el color que quisiera, pero ahí no terminó todo!!! hizo un drama enorme y todo el trabajo invertido en la boda se puso en riesgo por sus berrinches.... cabe decir que aunque me encantó mi boda, ese día tenía una carga más de estrés de la necesaria. claro que mis otras damas, hicieron hasta lo imposible por ayudarme ese día, no dejaron que ningún detalle que estuviera en sus manos fuera menos que perfecto.
ahora, con el tiempo y la cabeza fría me doy cuenta de cómo debí haber hecho las cosas:
1.- no ser indulgente con el tema de los vestidos, simplemente elegir el mismo modelo para todas.
2.- dejar que mi ahora esposo lidiara con su familia.
3.- no haberlas incluido cómo parte del cortejo desde un principio.