Creo que lo que más me ha servido es no pensar en el momento de la boda, ello logra quitarme ls nervios para revisar las cosas con más concentración y no estar con los nervios a tope.
Mato las expectativas por completo
Si el banquete está malísimo, si llueve y se inunda, si la carpa se incendia, está bien, yo no espero que el evento si quiera salga bien, solo me importa que al fin estaré unido con mi esposa ante Dios por el resto de mi vida, lo demás... es solo merengue... Claro, lo disfrutaré mucho, pero la mano de mi prometida es el 99% de lo que me importa.
Mi boda es en 13 horas
Y no soy novia... soy novio... ¬¬
Pero es hermoso que dado que tengo más tiempo disponible que mi novia, armar la boda y compartir los avances al final del día