Les comparto un artículo que me encontré por ahi por si son algo supertici@s jeje
Si tiene dudas sobre la mejor fecha para celebrar su matrimonio, quizás la numerología puede ayudarle.
El filósofo Pitágoras fue el precursor de la numerología, el estudio numérico de los arquetipos en su valor cualitativo. De acuerdo con la numerología, los números revelan los rasgos de personalidad de cada persona y el tipo de energía que transporta.
Según la numerología, la fecha de nacimiento: día, mes y año, muestra el número principal de cada persona, al que se denomina lección de vida y que indica “el reto que se tiene para la vida, lo que debe aprender”. Para encontrar el número que nos corresponde hay que sumar todos los dígitos de nuestra fecha de nacimiento y reducirlos a un número menor o igual a 9. Por ejemplo: 21 de junio de 1985 = 2+1+6+1+9+8+5= 32 / 3+2 = 5 (en este ejercicio, el número es la lección de vida 5).
De acuerdo con algunos expertos en numerología, se puede utilizar este método para conocer el número de la lección para la vida tanto del novio como de la novia, también muchas de las actitudes y decisiones que tomen a largo plazo como esposos, dependerán de ciertas reglas y dictados de la numerología determinadas por el día, mes, año y en ocasiones, hasta por la hora en que se realice la boda.
Si deseas encontrar el número que regirá tu matrimonio y descubrir algunos aspectos que definirán tu vida en pareja, puedes obtener el número realizando una operación sencilla: sumar el mes, día y año en que se efectuará su boda; la cantidad obtenida debe volver a sumarse hasta obtener un solo dígito, que corresponde al número energético que acompañará esa fecha y será el que regirá su matrimonio.
A continuación le damos a conocer lo que simboliza para la numerología cada uno de los dígitos, para comprender lo que significa la fecha que ha elegido para el día de su boda.
EL SIGNIFICADO DE CADA DÍGITO PARA LA BODA
Número 1: El número de lo indivisible rige su vida de pareja. Si se casaron fue para hacer un equipo invencible y luchan por ello desde un principio. Tienen capacidad para lograr cualquier cosa que se propongan. Respetan su individualidad y saben valorarse. Para que su vida sexual no se vea estancada, eviten las rutinas; hablen sobre su relación y no se oculten jamás sus deseos. La familia tardará un poco en llegar pues ustedes prefieren disfrutarse primero como pareja.
Número 2: Su matrimonio es una meta que aún después de alcanzada seguirá siendo su prioridad. Están totalmente comprometidos con sus trabajos, su familia, sus amigos, su casa, por lo que en ocasiones sentirán que la
vida se vuelve demasiado exigente. La mejor forma de sobrellevar esa carga es la unión que los hará fuertes. Son una pareja amorosa, se escuchan y les gusta expresar sus deseos y sentimientos. Su sexualidad suele ser muy activa y plena. Los hijos significarán también un gran compromiso, pero seguramente esperarán un tiempo, antes de tener familia.
Número 3: Aunque se adoran y forman un buen equipo, no se comunican lo suficiente como para llevar una relación transparente. Les cuesta trabajo hablar de temas relevantes por temor a hacerse daño, y por ello es difícil que caminen en la misma línea, incluso difieren mucho en ideas sobre sexualidad. Lo ideal es que aprendan a comunicarse. Se les recomienda tener un lugar en su casa, un día y una hora específicos para discutir los problemas importantes. Deben tener cuidado con el dinero y tomar la costumbre del ahorro.
Número 4: Les agobia la idea de no soportar el peso de un matrimonio, la casa, los hijos y el futuro; lo que los hace precavidos y comunicativos. Son una pareja sólida y bastante estable, gustan de vivir plenamente y de repente abusan de los tiempos libres. Son excelentes anfitriones y muy divertidos como padres. Es curioso pero no le dan gran importancia a la pasión en su relación, prefieren divertirse y pasarlo bien.
Número 5: La libertad e independencia son los eslabones que los unen como pareja. Juntos pueden estudiar, viajar, explorar nuevos sitios, divertirse, bailar, escapar, en fin, vivir todo de forma intensa; lo cual puede ocasionar un caos en sus vidas, sobre todo cuando los hijos lleguen, pues se sentirán de repente bruscamente limitados. Lo adecuado para ustedes es respetar sus espacios, evitar al máximo el tedio y expresar sus temores para, en pareja, ayudarse a superar cualquier barrera.
Número 6: Son la pareja más tradicional y amorosa que existe. Su casa proyecta calidez, armonía, fraternidad, paz, amistad. El problema es que dejan en segundo término la pasión y el romance, y en poco tiempo llegan a parecer hermanos más que esposos. Deben cuidar este aspecto si quieren tener realmente un matrimonio completo. Como padres les gusta inculcar la honestidad y tenacidad a sus hijos; son excelentes amigos y muy buenos vecinos.
Número 7: Una pareja con gran compatibilidad intelectual y espiritual. Les atrae todo lo relacionado con el estudio, las ciencias, el arte. Pueden hablar durante horas de un mismo tema y no necesitan estar rodeados de gente, pues ocupan su tiempo con actividades más mentales que físicas. Son un poco monótonos y la vida amorosa es otro tema de discusión. Sus hijos estarán igualmente interesados en el estudio y la cultura.
Número 8: Serán de las parejas más estables y juiciosas en su círculo de amistades; seguramente les pedirán consejos y son un ejemplo como individuos y pareja. Este tipo de matrimonios prefiere hablar y reflexionar los problemas, antes que estallar con una discusión sin sentido. Son excelentes jefes de familia, muy trabajadores y es casi un hecho que su situación económica sea desahogada.
Número 9: Son demasiado sensibles y un tanto dramáticos. La vida los aterra por los misterios que encierra, y al querer controlarlo todo, sufren constantes crisis y altercados. No deben sentirse amenazados, deben saber apoyarse en esa fuerte atracción y amor que los une y lograrán una relación muy sólida. Tanta fuerza emocional los hará llevar una vida sexual realmente intensa.
Finalmente, si Ud. o su novio son muy, pero muy supersticiosos, no se case un día 13, pues es sabido que es un número de ¿mal aguero?… Lástima, personalmente, ¡a mí me encanta!