Hola, Comunidad
Algunas recordarán aquel debate en el que les comenté que los trámites para casarnos por la iglesia católica estaban comenzando a volverse una pesadilla. Como nos casamos en Chihuahua, pero vivimos en SLP, debemos trasladar la ceremonia no solo de una parroquia a otra, sino de una diócesis a otra… y sobra decir que ha sido una locura.
Después de que nos explicaran los mil pasos a seguir decidimos no perder tiempo y pusimos manos a la obra, llamamos a nuestras respectivas madres para que fueran a solicitar las respectivas fes de bautismo actualizadas, y para que desempolvaran el cajón de los recuerdos en busca de nuestras actas de primera comunión y de confirmación. Depositamos dinero para que las autoras de nuestros días pudieran mandar los papeles por DHL, y así tenerlos lo más pronto posible en nuestras manos.
Mientras esto ocurría yo me di a la tarea de llamar a prácticamente todas las parroquias que conozco en Chihuahua, con la esperanza de que en alguna pudieran apartarme la fecha sin los papeles, apiadándose de mi situación por estar lejos, bajo compromiso de entregar las cartas en cuanto las tenga en mis manos. Igual que en la ocasión anterior, los únicos que se portaron amables conmigo fueron los de la parroquia de la Divina Providencia, que no solo fueron comprensivos, sino que me apartaron la fecha!!! Así que ya tengo mi fecha asegurada (con lápiz dijo la amable señora) en la parroquia que algún día me vio crecer espiritualmente… También en Catedral, la señora que me atendió se animó a ponerme la fecha con lápiz un poco de mala gana (y solo después de rogarle como si rogara por mi vida), pero si no tiene los papeles el miércoles (9 de marzo) abrirá la fecha de nuevo.
Finalmente los papeles llegaron el jueves pasado y como mi novio sale más temprano que yo del trabajo se lanzó a entregarlos en la Parroquia de San Judas Tadeo (que es la que nos corresponde en SLP)… y ahí es donde la pesadilla comenzó de nuevo. En la Divina Providencia y en Catedral nos pidieron una carta que indicara que ya hemos comenzado el trámite en SLP para dejar asentada la fecha y esperar por la carta traslado, así que mi novio llegó feliz con nuestros papeles, los entregó y le explicó a la señora que lo atendió (sí, la misma de la vez anterior, la que parece que está oliendo algo malo de manera permanente) que requeríamos una carta para apartar la fecha en Chihuahua. La señora ni le contestó, revisó los papeles y le comentó que faltaban algunas copias y las fotos, así que no se los recibió. Luego le dijo que en cuanto le llevemos todo completo ella puede hacer la carta sin problema y sellarla, pero necesita el nombre del Párroco y la dirección de la parroquia, porque la carta no puede ir dirigida “A quien corresponda”. Mi novio es muy paciente (pero de verdad, tiene paciencia de santo), así que le contestó muy amable a la señora que al día siguiente iríamos juntos y ya con toda la información, pero que le gustaría hablar con el padre para saber si existe la posibilidad de que la presentación se realice durante las vacaciones de semana santa, obviamente no en los días santos, ya que nuestros padres trabajan y es la única oportunidad que tienen de venir. La señora se molestó (o tal vez es que así tiene la cara, no lo sé) y le dijo que no podía pasarlo con el padre hasta que tuviera sus papeles listos y que las presentaciones son forzosamente 3 meses antes, eso significa que tendrá que ser en mayo, y en la parroquia las presentaciones solo se hacen en viernes. Mi novio, todavía sin alterarse, le explicó que es casi imposible que nuestros padres puedan trasladarse desde Chihuahua hasta SLP en mayo, porque no cuentan con vacaciones y mucho menos en viernes, que tal vez si fuera en sábado, y preguntó si existía alguna alternativa… esta vez la señora le contesto groseramente: “pues así se hacen las cosas aquí joven, aquí sí se hacen bien, si se quiere casar su presentación es en mayo y tiene que ser en viernes… le encargo los papeles”. Pues ahí sí se le acabó la paciencia a mi novio, salió enojadísimo y sin decir ni gracias, ni buenas noches. Cuando llegué a la casa lo encontré tenso y todavía algo molesto, y en cuanto me vio me contó todo, le destapé una cerveza para que se calmara, y empezamos a reírnos de la señora y su particular cara.
Por supuesto que mi novio cumplió con su palabra, regresó al siguiente día (este viernes) con todas las copias que faltaban y decidido a salir de ahí con una respuesta más favorable. Yo prometí alcanzarlo en cuanto saliera del trabajo. Pues les cuento que llegó a las 5:00pm a las oficinas de la parroquia y entregó de nuevo los papeles, como la señora ya no se los pudo devolver porque esta vez iban completos (y hasta con copias extra), empezó con un interrogatorio policiaco preguntándole a mi novio si él era católico (la señora tiene la fe de bautismo, comunión y confirmación en la mano y se le ocurre preguntar eso), que si yo era católica (lo mismo, tiene mis papeles en las manos), que si mis papás y los papás de él son católicos, que si vamos a misa y si vamos por qué nunca vamos a esa parroquia, que si creemos en Dios, que si por qué nos queremos casar por la iglesia, que por qué nos vamos a casar primero por el civil, que si tenemos hijos, que si en dónde trabajamos, cuántas horas al día trabajamos, qué puestos desempeñamos… créanme que después de todo lo que preguntó, el sacerdote ya no tiene razón de hacer más preguntas, puede pedirle a la señora un reporte de nuestras respuestas. Lo tuvieron ahí 3 horas!!!
Después del interrogatorio mi novio le volvió a explicar nuestra situación especial y las razones por las que nuestros papás no pueden venir en mayo a la presentación, y pidió hablar con el padre (ahora que ya había llevado los papeles completos) para ver si había oportunidad de hacer la presentación antes de esa fecha (estas vacaciones). La señora se negó a pasarlo con el padre, diciendo que estaba muy ocupado, y entonces llegué yo. Después de mucho rogarle, y de más preguntas por su parte (empiezo a creer que a la señora lo que le interesa es el chisme) finalmente se dignó a darnos la famosa carta de inicio de trámites, para que nosotros podamos apartar la fecha en Chihuahua, pero no nos resolvió nada de la presentación, de hecho la carta dice que nuestra presentación será el 6 de mayo, y tampoco nos dejó hablar con el padre.
Pues total que aún nos queda por resolver qué vamos a hacer con la cuestión de la presentación. Mi suegra muy animada dijo que ahora que vengan para la boda civil iremos todos juntos a la iglesia a pararnos ahí hasta que el padre nos reciba (un encanto mi suegra), para hacer la presentación y firmar los papeles en ese momento. Y a mí todavía me queda la espinita de que la carta llegue a tiempo a Chihuahua, no estaré tranquila hasta que mi mamá me hable para confirmar que ya tengo apartada la fecha oficialmente.
¿Ustedes qué opinan brides? ¿Algún consuelo o consejo?