Empezar a idear todas las acciones para evitar el estrés mínimo dos semanas antes de la boda.
- Elabora una lista con tareas que aun te quedan por finalizar y ve tachando según lo vayas completando. Asegúrate de llevar en el bolso una pequeña libreta donde puedes ir descartando las tareas, tomar notas y demás.
- Cuida tu cuerpo y tu mente. Aprovecha los cupones con ofertas para sesiones de spa, masajes y tratamientos de belleza que ayudarán a relajarte por muy poco.
- Bebe mucha agua y come sano. Beber mucha agua te ayudará a tener la piel hidratada. Comer sano y controlar el consumo de café, alcohol y comidas grasos te aportará vitalidad para afrontar el sueño.
- Intenta dormir mínimo 8 horas todos los días, especialmente durante los últimos 7 días antes de la boda. Dormir bien es la fórmula para poder afrontar todas las emociones y estar más relajada el día de la boda.
- CONTROLAR LOS NERVIOS EL DÍA DE LA BODA
Conseguir estar relajada y evitar el efecto bridezilla hay que trabajarlo durante las semanas antes de la boda. Los consejos comentados anteriormente te ayudarán a prepararte y te será mucho más fácil despreocuparte en tu gran día. Por la noche tómate un baño relajante, enciende unas velas, ponte música y grábate en la mente lo siguiente: “ya está todo hecho, algo siempre sale mal así que asúmelo y disfruta a tope de tu día”.
- En cuanto te despiertas ya sabes que vendrán a maquillarte y a peinarte (os aconsejo mucho que busques a los profesionales que ofrecen servicios a domicilio, no es lo mismo prepararte en casa que en una peluquería).
- Mientras que te arreglas intenta rodearte de personas tranquilas. Lo mejor es vestirte en un lugar tranquilo como un hotel o una casa donde no vayan haber muchas personas.
- Camino a la ceremonia, respira hondo un par de veces y disfruta del momento. La llegada de la novia es uno de los momentos más bonitos de una boda. Tú estarás radiante así que no tendrás que preocuparte por nada.
- Para tu mayor comodidad ten asignado una persona que te ayude con el velo, otra persona que te ayude a repartir los regalos de la boda y aunque te puede sorprender, necesitarás una persona de confianza que te acompañará al baño. Habla con esas personas antes de la boda para que pueden estar pendiente y no tienes que buscarles a ellas.
- Para la fiesta te recomiendo preparar unas cuñas cómodas o unas bailarinas. Querrás bailar hasta el final.